Mi padre ha muerto
a mi padre
Armando Montiel Olvera
in memoriam
FRAGMENT
Mi padre ha muerto. Quiero beberme su silencio recordar su olor sus manos frías blancas y perfectas y su rostro en el descanso. Mi padre ha muerto. Quiero rezarle un padre nuestro y al mismo tiempo ponerle sobre el pecho la estrella de David y un clavel blanco. Ha muerto y quiero grabarlo entre mis ojos para siempre. ¡Qué se lleven su cuerpo! Yo poseo su voz sus movimientos sus regalos tiernos. Poseo su juventud y su vejez su salud y sus días de agonía. ¡Qué se lleven su cuerpo! En mí quedaron las caricias de sus manos la mirada aceitunada de sus ojos y su desfallecido aliento. A mí pertenece su camino andado. A mí sus gestos y sus mañas. También sus deseos incumplidos. Tengo sus ropas sus sombreros sus pipas sus fotografías y programas de concierto. Tengo el mundo que me dio por ser mi padre. ¡Qué se lleven su cuerpo! Esa casa imperfecta que lo traicionó y no supo guardar su alma delicada. ¡Qué se lleven su cuerpo! Padre nuestro padre sólo mío Que estás en el cielo que estás en todas partes Santificado sea tu nombre tu nombre con el nombre que me diste Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo tu voluntad que ahora sólo pertenece al cielo Danos hoy el pan de cada día dame la eternidad de tus bendiciones Perdona nuestras ofensas como también tú debes perdonarme los descuidos Nosotros perdonaremos en tu nombre en tu nombre perdonaremos todo A quienes nos ofendan y tú hayas ofendido No nos dejes caer en tentación no me abandones padre en esta tierra Y líbranos de todo mal y a mi corazón si acaso olvida Amén...